sábado, 23 de septiembre de 2017

¡Nueva cara del blog!


Tal y como se estarán dando cuenta, el blog tiene nueva imagen. 

Antes que nada, les quiero pedir el favor de que me digan si todo se ve bien desde donde sea que estén viéndolo. Si ven algo mal, raro, o de plano no se ve el contenido, por fa avísenme.

La verdad es que llevaba mucho tiempo considerando la idea, pero no me animaba pensando en lo difícil que sería. Cuando abrí el blog lo hice de la manera más simple posible, y así lo mantuve hasta hoy; no me tomé  la molestia de "maquillarlo", pero me gustaba mucho, y es que cómo no iba a ser así, si este espacio es más que un hogar para mí. Es mi refugio.

El caso es que, de cualquier manera, me parecía un poquito... poco elaborado, así que hace más de un mes empecé con lo que sería su reconstrucción. Oh, ingenuo de mí, que pensé que sería súper fácil, pero no, LES JURO QUE VÍ MI VIDA EN HTML DURANTE DÍAS y quise rendirme y dejar todo tal y como estaba, pero ustedes fueron la fuerza que me mantuvo ahí luchando, aprendiendo de la manera más empírica posible que se imaginen, y creo que lo logré :').

De cualquier manera, no niego que voy a extrañar mucho su antiguo aspecto. Justo anoche me puse a ver las primeras entradas que hice y me dieron hasta ganas de llorar.

No les cuento todo mi calvario porque no vale la pena, pero les diré que intenté instalar una plantilla "prefabricada" a la cual, por más que lo intentara, no le podía modificar nada, así que tras TRES SEMANAS trabajando en ella, tiré la toalla y empecé esta desde cero. Me siento satisfecho con ella y, de hecho, me siento muy feliz al ver que casi todo lo que tenía en mente lo he logrado plasmar aquí. Eso sí, no es el blog más organizado, ni el más pulcro que digamos, pero con mis míseros conocimientos en programación me parece casi un milagro haber conseguido que se vea así jajaja.

También habrá algunos cambios, nuevas secciones, y algunas novedades, como por ejemplo MI NUEVO TWITTER, así que, si les nace, o si les pica la curiosidad, los invito a que se pasen por ahí (haciendo click en el pajarito de la derecha del blog). Todo lo demás lo irán viendo en los próximos días.

Mi más sincero respeto a todos esos bloggers que tienen sus espacios súper arreglados y bonitos; no tenía ni idea de que mantenerlos así fuera una tarea tan ardua. También aprovecho para darles las gracias a todos aquellos que me echaron una manita; muchos de ustedes también son mi inspiración para continuar con esta aventura e intentar hacerlo cada día mejor ;). Algún día, cuando sea rico y famoso, les juro, les prometo que les tengo que hacer un regalito :3.

Por ahora, los dejo, pero así como espero que sea de su agrado el nuevo look, también espero que nos sigamos viendo por aquí durante mucho tiempo más. Los quiero un montón.

domingo, 10 de septiembre de 2017

Me muero.


Son exactamente las 12:22 de la noche mientras les escribo esto. Si les soy sincero, esto es lo más tarde que he escrito para el blog. Se supone que mañana me levanto temprano, pero PRIORIDADES, ustedes saben jajaja.

Tengo que hablarles de algo que me acaba de pasar no hace ni 10 minutos y de lo cual tengo que desahogarme por más tonto que les pueda parecer.

Resulta que desde hace días en mi feed de Youtube me salía un vídeo titulado "High School Musical 4: Once a wildcat" y que yo OBVIAMENTE sabía que era un fake; un fanmade tráiler, pues, sobre la supuesta cuarta película de High School Musical que va a salir. Por si no lo sabían, yo soy SÚPER FAN de, sí, High School Musical ;). Pero no cualquier tipo de fan, no señores, soy mega obsesionado, me sé todas las canciones, me veo las pelis cada vez que las pasan... en fin. Han visto el meme este de ¿Y dónde están las rubias? Pues así jajaja.

Algo así jajaja.

Pero bueno, yo no me animaba a ver el vídeo hasta que esta noche me entró la nostalgia lo ví. ME MUERO. ME RECONTRA MUERO. No se imaginan la cantidad de emociones que me trae la historia de HSM. Literalmente es mi infancia, mi adolescencia, mi todo. Todavía no me puedo creer que ya han pasado más de diez años desde la primera parte, y ver a los actores así todos mayores medio me partió el corazón. Todavía me parece que fue ayer cuando sin querer me puse a verla, y de repente me sentí mal, en ese modo tipo "antes todo era tan bonito..."

No les digo cómo fue mi historia con las películas, porque podríamos sacar una telenovela bien dramona. Pero no me las toquen porque hay problemas jajaja.

El pinche vídeo me dió en todos los sentimientos, y aquí ando, con la nostalgia a flor de piel que no se me va. Es que, no está lo que se dice muy bien hecho que digamos, pero logra traer de nuevo toda la emoción que sé muchos de los que la amamos sentimos. Y la canción, ¿¿¿¿POR QUÉ, DIOS, POR QUÉ????

Aquí el famoso vídeo por si les interesa:


Díganme que no :'(
Todo esto me llevó a pensar que el tiempo pasa. EL JODIDO TIEMPO PASA Y NO NOS DAMOS CUENTA. O sea, no sé si a ustedes les pase, pero yo a veces ni le presto atención a algo y ya luego analizándolo más detenidamente me da de todo al ver lo mucho, bueno, no lo mucho, sino lo muchísimo que ha sucedido desde entonces. Y es horrible. Me da una ansiedad que ni se imaginan.

En fin... volvemos al tema de "todo tiempo pasado fue mejor", así que basta, que escribí esto para quejarme y así me voy a despedir :'D. Me voy a retroceder unos añitos hasta mi época Disney y me pondré a cantar a grito herido con las canciones de High School a ver si se me pasa.


Chaíto.

martes, 5 de septiembre de 2017

Opinión: "El viento no es un río" de Brian Payton

Título: El viento no es un río
Autor: Brian Payton
Páginas: 320
Publicado por: Umbriel
Sinopsis: Un apasionante relato de supervivencia y una historia de amor épica en la que u matrimonio -separado por la única batalla de la Segunda Guerra Mundial en territorio norteamericano- lucha por su reencuentro.

Islas Aleutianas, 1943. Tras la muerte de su hermano menor en Europa, el periodista John Easley siente la necesidad de exponer un oculto y creciente conflicto: la invasión japonesa y la ocupación de las islas Aleutianas de Alaska. Pero cuando John acompaña a la tripulación de un bombardero, el avión es derribado sobre la isla de Attu, y deberá rendirse o sobrevivir en un entorno cruel.

A tres mil kilómetros al sur, su mujer Helen no puede aceptar la desaparición de su marido. Desesperada por encontrarlo y reunirse con él, se embarcará en un extraordinario viaje desde la seguridad de su casa de Seattle hasta los confines de la guerra del norte.

Historia evocadora, ricamente ambientada, de la vida y la muerte, el compromiso y el sacrificio. El viento no es un río ilustra la fragilidad de la vida y el intenso poder del amor.

Opinión: A veces me olvido de las razones por las que se me antoja leer un libro. Muchas veces ayuda, y otras no tanto, pero la novela de la que les voy a escribir un poco sin duda se encuentra en el primer grupo. No recuerdo exactamente por qué decidí adquirirla, y aunque sabía que tocaba el tema de la Segunda Guerra Mundial, no conocía de qué forma; les puedo decir que no me arrepiento. Para nada.

Nos encontramos en 1943, hacia finales de la segunda guerra, con el periodista John Easley, quien decide hacerse corresponsal de un conflicto situado en Alaska y que además está estrictamente vetado por las autoridades nacionales. Me explico: la invasión de las islas Aleutianas en Alaska fue negada en todo momento por los Estados Unidos; claro, hasta que le guerra terminó.

John se verá en una situación en la que sobrevivir será lo primordial, mientras que su esposa, Helen, a miles de kilómetros de distancia siente que algo anda mal. Es ahí cuando ella decide tomar cartas en el asunto y arriesgarse a todo con tal de saber el paradero de su marido. Los seguiremos a ambos en su travesía hacia lo incierto y en un recorrido plagado de adversidades que los llevará a redescubrirse, madurar y crecer.

Al no poder hablar más abiertamente sobre la trama del libro, intentaré explicar su valor como tal.

Es increíble la cantidad de hechos que desconocemos sobre la ya mencionada Segunda Guerra Mundial, un conflicto que, como todos sabemos, marcó la historia de la humanidad. Esta novela en particular nos presenta un escenario nuevo y muy poco explorado de ella según tengo entendido: la ya mencionada aquí invasión de las islas Aleutianas en Alaska. Tal y como me sucedió en su momento con Entre tonos de gris, me encontré aturdido y devastado por una realidad a la que antes era ajeno pero de la que ahora difícilmente podré olvidarme.

Ver de nuevo lo que le hizo la guerra a un sinnúmero de personas me causa un dolor indescriptible, no sabiendo de qué otra manera ponerlo, y también hizo que de mi propia impotencia me imaginara lo que debió de sufrir aquella gente. Es algo que no se puede transmitir con palabras, aunque creo poder darles una idea: los seres humanos podemos llegar a ser horribles. Hay que aceptarlo. Aquellos que sufrieron sin razón alguna merecen ser recordados, su historia debe permanecer con nosotros como recordatorio de lo que somos capaces, de lo que no tiene nombre.

Son historias como la de este libro las que nos permiten lograrlo.

Tuve que leerlo pausadamente, sin prisas con tal de poder digerir su parte histórica, que para nada opaca la de ficción. Al contrario, esta última se ve enriquecida gracias a ella, y no puedo más que aplaudir lo bien lograda que está, pues aunque es sutil no llega a los excesos, brindándonos uno de los más bellos romances que haya leído hasta ahora.  En resumen, todo está donde tiene que estar en este relato tan sobrio.

Por último, un dato que para mí significa mucho: antes de este, el único libro cuya lectura terminé para inmediatamente ponerme a llorar fue El diario de Ana Frank, que es igual de conmovedor.

Merece: