Opinión: "Thirteen reasons why" de Jay Asher

Título: Thirteen reasons why
Autor: Jay Asher
Páginas: 288
Publicado por: Razorbill
Sinopsis: Clay Jensen returns home from school to find a mysterious box with his name on it lying on his porch. Inside he discovers thirteen cassette tapes recorded by Hannah Baker, his classmate and crush who committed suicide two weeks earlier.

On tape, Hannah explains that there are thirteen reasons why she decided to end her life. Clay is one of them. If he listens, he'll find out how he made the list.

Through Hannah and Clay's dual narratives, debut author Jay Asher weaves an intricate and heartrending story of confusion and desperation that will deeply affect teen readers.

Sinopsis en español (Traducción propia): Clay Jensen regresa a su casa de la escuela para encontrar una misteriosa caja marcada con su nombre en la puerta de entrada. En su interior descubre trece cintas grabadas por Hannah Baker, su compañera y amor platónico, quien se suicidó hace dos semanas.

En las cintas, Hannah explica que hay trece razones por las cuales ella decidió terminar su vida. Clay es una de ellas. Si decide escucharlas, encontrará el porqué se encuentra en la lista.

A través de la narración a doble voz de Hannah y Clay, el ahora nuevo autor Jay Asher entreteje una intrincada y conmovedora historia de confusión y desesperación que tocarán profundamente a los lectores jóvenes.

Opinión: Hay ocasiones en las que un libro se atraviesa en nuestro camino y nos da tres vueltas. Me explico mejor: decidimos leerlo sin razón aparente, nos gusta un poco, nos gusta mucho, nos decepciona, y, finalmente, nos deja sin saber qué hacer. Esa es la situación que este libro causó en mí; una vez terminé de leerlo no quise saber nada más (ni aún hoy) de historias plasmadas en letras.

Desde el principio sabemos que la historia gira entorno a Hannah Baker, una joven estudiante de secundaria que decidió suicidarse. No dejó de existir por completo, pues dejó tras de sí una serie de cintas explicando las razones por las cuales tomó su decisión. Dichas cintas pasarán, uno a uno, por las manos de quienes provocaron, o por lo menos interfirieron, en las circunstancias que la llevaron a querer morir.

No conocemos a todos aquellos quienes han recibido las cintas, pues únicamente acompañaremos a Clay durante su viaje al escucharlas, aunque sí conoceremos sus historias. Clay es un chico perfecto, o aparentemente lo es, razón por la cual no comprende por qué Hannah lo puso en las cintas; ambos eran más bien... conocidos, pero una vez escucha de nuevo la voz de Hannah, sus sentimientos por ella resurgen.

La narración está hecha a dos voces: la de Clay, que nos habla desde su experiencia con Hannah y escuchando las cintas que dejó, y la de Hannah, a través de las cintas que dejó tras su suicidio. Ambas están cargadas de una fuerza sobrecogedora, aunque de manera distinta cada una, claro está. Por un lado, Clay se encuentra destrozado tras recibir el paquete de Hannah, y esta, mientras cuenta sus razones, poco a poco va renunciando a todo, sin importar cuanto dolor ello le causa.

El desarrollo de la historia transcurre a un ritmo lento, pero con una viveza poco usual en las novelas de corte juvenil. Puesto que la mayor parte del tiempo estamos leyendo unas grabaciones que están siendo "reproducidas", es casi como si pudiéramos escucharlas; ahora mismo casi puedo oír la voz de Hannah, fuerte a pesar de todo, sin abandonar sus preocupaciones tampoco. El libro en general es todo un viaje, de manera literal, se va de un lado para otro, redescubriendo el espacio que alguna vez alguien que ya no está ocupó.

Las razones que nuestra protagonista femenina tuvo para hacer lo que hizo pueden parecer en principio un tanto "simples", pero a pesar de eso van cobrando poco a poco un sentido mayor, tal y como en sus propias palabras ella lo comenta, creando un "efecto de bola de nieve". Hay algunas más fuertes que otras, e incluso algunas que resultan aburridas, pero al final todas y cada una de ellas resultan ser por completo relevantes.

El autor ha sabido manejar los sentimientos de una situación tan compleja como la que nos presenta en su novela: la culpabilidad, el desconsuelo, la nostalgia, la rabia, la esperanza. Cada acción, cada lugar y cada personaje tiene la habilidad de despertar no uno, sino muchos de ellos, y el lector, si bien creerá en un principio que no los comprende, lo hará. Tarde o temprano, lo hará.

Al final... bueno, el final es más bien el principio, porque ya sabemos lo que ocurrió. Tal vez es por eso que,  a mi parecer, la historia perdió un poco su profundidad. Se pierde un poco el sentimiento, el hilo conductor que lleva hasta ahí, para darle paso a un desenlace un tanto abrupto, y puede quedarse uno pensando en si realmente llegó a conocer a la verdadera Hannah Baker.

Por eso, y por mucho más, les recomendaría esta historia. Si quieren leer un libro juvenil diferente, que los lleve a sentir a otro nivel, a pensar incesantemente no solo en la historia, sino en ustedes mismos, háganlo, porque es, en realidad, una experiencia particular.

Merece: